La madre de Alina: "Quiero agradecer todo el apoyo de Teulada Moraira. Mi hija tenía un gran corazón"
Crudu Viorica y Ana María Mocanu, madre y cuñada de la mujer asesinada por su expareja, realizan los trámites para repatriar a Rumanía el cadáver y se personan en el caso como acusación particular

A Crudu Viorica se le quiebra la voz. Transmite a través de Teulada Moraira digital su agradecimiento al Ayuntamiento y los Servicios Sociales de Teulada Moraira y a todos esos vecinos que conocían y apreciaban a su hija y que han expresado a la familia su apoyo y solidaridad. Crudu es la madre de Alina, la mujer de 36 años asesinada por su expareja, Arthur K., quien luego arrojó el cadáver a un contenedor de basura. Le hubiera gustado conocer el municipio junto a su hija y su nieto de 14 años. Traer a la otra hija de 9 años de Alina.Pero un asesino machista se ha cruzado en el camino de esta familia.
Crudu está destrozada. Ha viajado desde Rumanía junto a Ana María Mocanu, cuñada de Alina. Asistida por la abogada Veronica Ene, acudió ayer al juzgado de Dénia a personarse en su nombre y el de la niña de 9 años (al niño lo representa el abogado dianense Alex Rodenkirchen) como acusación particular. Además, ha realizado los trámites para repatriar el cuerpo de su hija. La familia quiere estar cerca de Alina, enterrarla en el pueblo de Satnoieni, en el distrito de Calarasi (Rumanía). "El daño que se le ha hecho a la familia es irreparable. Pero quieren, al menos, tener allí a Alina y poderla llorar", indicó ayer la letrada.
Crudu solo tiene palabras de gratitud para los vecinos de Teulada Moraira. "Nos sentimos muy arropados. Se nota que aquí querían a mi hija". Recuerda que Alina era "muy alegre y se volcaba con los demás”.
“Siempre ayudaba. Tenía un gran corazón". La madre afirma que su hija le dijo que tenía miedo de su expareja. "Las mujeres deben salir a la calle contra esto y decir 'basta ya'", advierte.

Mientras, Ana María Mocanu asegura que para ella Alina era "como una hermana". "Era una excelente amiga".
Las dos mujeres estuvieron ayer con el hijo de 14 años de Alina.Necesitaban abrazarlo. Expresarle que su familia de Rumanía está con él.
El asesinato de esta mujer ha conmovido a toda la población y a toda la Marina Alta. Hoy se cumplen dos semanas del macabro crimen. Arthur, al que sus allegados definen como violento y acosador, siguió a Alina y luego la citó en su inmobiliaria de Moraira, donde la apuñaló y mató. Dejó pasar 24 horas. Se deshizo del cadáver arrojándolo a un contenedor de basura.
A Crudu Viorica se le quiebra la voz. Transmite a través de Teulada Moraira digital su agradecimiento al Ayuntamiento y los Servicios Sociales de Teulada Moraira y a todos esos vecinos que conocían y apreciaban a su hija y que han expresado a la familia su apoyo y solidaridad. Crudu es la madre de Alina, la mujer de 36 años asesinada por su expareja, Arthur K., quien luego arrojó el cadáver a un contenedor de basura. Le hubiera gustado conocer el municipio junto a su hija y su nieto de 14 años. Traer a la otra hija de 9 años de Alina.Pero un asesino machista se ha cruzado en el camino de esta familia.
Crudu está destrozada. Ha viajado desde Rumanía junto a Ana María Mocanu, cuñada de Alina. Asistida por la abogada Veronica Ene, acudió ayer al juzgado de Dénia a personarse en su nombre y el de la niña de 9 años (al niño lo representa el abogado dianense Alex Rodenkirchen) como acusación particular. Además, ha realizado los trámites para repatriar el cuerpo de su hija. La familia quiere estar cerca de Alina, enterrarla en el pueblo de Satnoieni, en el distrito de Calarasi (Rumanía). "El daño que se le ha hecho a la familia es irreparable. Pero quieren, al menos, tener allí a Alina y poderla llorar", indicó ayer la letrada.
Crudu solo tiene palabras de gratitud para los vecinos de Teulada Moraira. "Nos sentimos muy arropados. Se nota que aquí querían a mi hija". Recuerda que Alina era "muy alegre y se volcaba con los demás”.
“Siempre ayudaba. Tenía un gran corazón". La madre afirma que su hija le dijo que tenía miedo de su expareja. "Las mujeres deben salir a la calle contra esto y decir 'basta ya'", advierte.
Mientras, Ana María Mocanu asegura que para ella Alina era "como una hermana". "Era una excelente amiga".
Las dos mujeres estuvieron ayer con el hijo de 14 años de Alina.Necesitaban abrazarlo. Expresarle que su familia de Rumanía está con él.
El asesinato de esta mujer ha conmovido a toda la población y a toda la Marina Alta. Hoy se cumplen dos semanas del macabro crimen. Arthur, al que sus allegados definen como violento y acosador, siguió a Alina y luego la citó en su inmobiliaria de Moraira, donde la apuñaló y mató. Dejó pasar 24 horas. Se deshizo del cadáver arrojándolo a un contenedor de basura.
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