1 de cada 3 fallecidos murió en uno de los 1.314 tramos de secundarias de especial peligrosidad
Los radares de la DGT que detectan si el conductor va sin cinturón o hablando por el móvil ya están en funcionamiento
La Dirección General de Tráfico ya anunció el pasado mes de diciembre que iba a dar un paso más en el control de las carreteras secundarias, prestando atención a la vigilancia, mediante medios automatizados, del uso del cinturón de seguridad y también de la utilización del móvil por los conductores. Pues bien, los nuevos radares que ha instalado la Dirección General de Tráfico (DGT) en 70 puntos de la red de carreteras secundarias ya están en funcionamiento
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Los nuevos radares que ha instalado la Dirección General de Tráfico (DGT) en 70 puntos de la red de carreteras secundarias son capaces de detectar si el conductor no lleva el cinturón abrochado y si éste circula utilizando el teléfono móvil, además de controlar la velocidad a la que marcha el vehículo.
Estos dispositivos, similares a los radares, son capaces de comprobar si los ocupantes del vehículo llevan correctamente abrochado el cinturón de seguridad o circulan utilizando el móvil y, en caso contrario, enviar al centro de control los datos para formular la denuncia.
Mediante cámaras captan unas 50 imágenes por segundo, siendo capaces de comprobar el uso del cinturón y de proporcionar las pruebas necesarias para identificar el vehículo y tramitar la denuncia.
Los resultados de la última campaña de control en carreteras convencionales, realizada en octubre, arrojaron la cifra de 1.349 conductores denunciados por no utilizar cinturón de seguridad –más 57 que no hacía uso del casco– y otros 1.113 por utilizar el móvil al volante. ¡En solo una semana! Y un último dato: el 77% de los fallecidos en estas carretas no llevaba cinturón
1 de cada 3 fallecidos murió en uno de los 1.314 tramos de secundarias de especial peligrosidad.
Los nuevos radares que ha instalado la Dirección General de Tráfico (DGT) en 70 puntos de la red de carreteras secundarias son capaces de detectar si el conductor no lleva el cinturón abrochado y si éste circula utilizando el teléfono móvil, además de controlar la velocidad a la que marcha el vehículo.
Estos dispositivos, similares a los radares, son capaces de comprobar si los ocupantes del vehículo llevan correctamente abrochado el cinturón de seguridad o circulan utilizando el móvil y, en caso contrario, enviar al centro de control los datos para formular la denuncia.
Mediante cámaras captan unas 50 imágenes por segundo, siendo capaces de comprobar el uso del cinturón y de proporcionar las pruebas necesarias para identificar el vehículo y tramitar la denuncia.
Los resultados de la última campaña de control en carreteras convencionales, realizada en octubre, arrojaron la cifra de 1.349 conductores denunciados por no utilizar cinturón de seguridad –más 57 que no hacía uso del casco– y otros 1.113 por utilizar el móvil al volante. ¡En solo una semana! Y un último dato: el 77% de los fallecidos en estas carretas no llevaba cinturón
1 de cada 3 fallecidos murió en uno de los 1.314 tramos de secundarias de especial peligrosidad.
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