Sí hombre sí...
Menudo ojo tienen los Reyes Magos, me trajeron...
(Cosas que pasan al cambiar de un día para otro de la ciudad al campo sin tener ni idea)
De
verdad que yo no sé qué hace la Nasa enviando sondas al espacio para
averiguar si hay vida inteligente en otro planeta… pues la hay porque si
no ¿cómo se explica que los Reyes Magos llegaran a mi aldea después de
casi 15 años sin venir? Pues eso solamente es posible a que una mente
superior lo sabía y los guió a este recóndito lugar, no cabe la menor
duda, vamos, fijísimo.
¿Y qué pusieron los Reyes en mi casa a mis
vecinos? Pues a Maruja una cestilla para el pan, que no parece mucha
cosa ¿verdad?, pero es que a Virtudes otra, y a la familia Caseto otra,
¡¡¡ impresionante !!!. Pero es más; las tres cestitas, las tres, son
iguales, idénticas, pero cuando digo idénticas es eso, idénticas
idénticas… increíble.
¿Y a Manolo? Bueno, esto ya es para
ponérsele a uno los pelos de punta. Un día antes de que llegaran los
Reyes, que no hablo de un mes o una semana eh, no; un solo día antes
dijo que en el monte hacía mucho frío por la mañana cuando va a
trabajar, ¿pues qué creéis que le trajeron los Reyes, qué podéis
imaginar, si tenéis capacidad para ello? ¡¡¡ Seis pares de calcetines,
seis pares !!!, ¡¡¡ toque el género señora, toque el géneroooo !!!,
seis pares como seis soles. ¡¡¡ Im-pre-si-o-nan-te !!!.
Pues si
esto es ya de por sí sobrecogedor, lo que es escalofriante es lo que me
trajeron a mí. Esto… es que me tiembla el pulso al escribirlo: ¡¡¡ una
carretilla !!!, como lo digo, ¡¡¡ una carretilla !!!, pero de las de
verdad, no de jugar.
Mira si habrá vida inteligente que ni yo
mismo sabía que necesitaba una carretilla hasta que me di cuenta que
enfrente de casa hay como cuatro toneladas de madera para acarrear. ¿Y
cómo pudieron saber que necesitaba una carretilla cuando ni yo mismo lo
sabía? Pues por eso, porque hay vida inteligente, y esos seres que la
Nasa busca que te busca y que han guiado a los Reyes a mi aldea han sido
ellos y solamente ellos los que han abierto mi mente hacia una nueva
dimensión: la de la leña.
¿Que cómo es la carretilla?. Bueno,
bueno, bueno… Preciosa, nunca vi una carretilla igual; color azul cielo;
con unos manguitos haciendo juego; con una rueda de goma negra
preciosa, hinchable y deshinchable; con una estructura metálica que se
nota que ha sido echa a conciencia, muy aerodinámica, con unos bordes
puliditos… ¡¡¡ buah !!!.
Como yo soy muy cuidadoso, porque mi
madre siempre de pequeño me decía «no toques, no toques»; pues eso, ni
la toco, y como aquí hay mucho verde, la tengo aparcada en zona de
residentes. Pero no creáis que me conformo con que esté bien
estacionada, ¡¡¡ qué va !!! , cada dos por tres (6) desde la ventana de
casa la veo, y a veces me acerco a ella, la miro, la remiro, la limpio
con una bayetita y tengo unas ganas de utilizarla… pero como no
encuentro el manual de instrucciones me pregunto: «¿Y si la estropeo, y
si… no vaya a ser que…?» Ni hablar, hasta que no encuentre el manual, ni
tocarla, pero bonita bonita es… bueno, nunca vi cosa igual, pero nunca.
(Cosas que pasan al cambiar de un día para otro de la ciudad al campo sin tener ni idea)
De
verdad que yo no sé qué hace la Nasa enviando sondas al espacio para
averiguar si hay vida inteligente en otro planeta… pues la hay porque si
no ¿cómo se explica que los Reyes Magos llegaran a mi aldea después de
casi 15 años sin venir? Pues eso solamente es posible a que una mente
superior lo sabía y los guió a este recóndito lugar, no cabe la menor
duda, vamos, fijísimo.
¿Y qué pusieron los Reyes en mi casa a mis
vecinos? Pues a Maruja una cestilla para el pan, que no parece mucha
cosa ¿verdad?, pero es que a Virtudes otra, y a la familia Caseto otra,
¡¡¡ impresionante !!!. Pero es más; las tres cestitas, las tres, son
iguales, idénticas, pero cuando digo idénticas es eso, idénticas
idénticas… increíble.
¿Y a Manolo? Bueno, esto ya es para
ponérsele a uno los pelos de punta. Un día antes de que llegaran los
Reyes, que no hablo de un mes o una semana eh, no; un solo día antes
dijo que en el monte hacía mucho frío por la mañana cuando va a
trabajar, ¿pues qué creéis que le trajeron los Reyes, qué podéis
imaginar, si tenéis capacidad para ello? ¡¡¡ Seis pares de calcetines,
seis pares !!!, ¡¡¡ toque el género señora, toque el géneroooo !!!,
seis pares como seis soles. ¡¡¡ Im-pre-si-o-nan-te !!!.
Pues si
esto es ya de por sí sobrecogedor, lo que es escalofriante es lo que me
trajeron a mí. Esto… es que me tiembla el pulso al escribirlo: ¡¡¡ una
carretilla !!!, como lo digo, ¡¡¡ una carretilla !!!, pero de las de
verdad, no de jugar.
Mira si habrá vida inteligente que ni yo
mismo sabía que necesitaba una carretilla hasta que me di cuenta que
enfrente de casa hay como cuatro toneladas de madera para acarrear. ¿Y
cómo pudieron saber que necesitaba una carretilla cuando ni yo mismo lo
sabía? Pues por eso, porque hay vida inteligente, y esos seres que la
Nasa busca que te busca y que han guiado a los Reyes a mi aldea han sido
ellos y solamente ellos los que han abierto mi mente hacia una nueva
dimensión: la de la leña.
¿Que cómo es la carretilla?. Bueno,
bueno, bueno… Preciosa, nunca vi una carretilla igual; color azul cielo;
con unos manguitos haciendo juego; con una rueda de goma negra
preciosa, hinchable y deshinchable; con una estructura metálica que se
nota que ha sido echa a conciencia, muy aerodinámica, con unos bordes
puliditos… ¡¡¡ buah !!!.
Como yo soy muy cuidadoso, porque mi
madre siempre de pequeño me decía «no toques, no toques»; pues eso, ni
la toco, y como aquí hay mucho verde, la tengo aparcada en zona de
residentes. Pero no creáis que me conformo con que esté bien
estacionada, ¡¡¡ qué va !!! , cada dos por tres (6) desde la ventana de
casa la veo, y a veces me acerco a ella, la miro, la remiro, la limpio
con una bayetita y tengo unas ganas de utilizarla… pero como no
encuentro el manual de instrucciones me pregunto: «¿Y si la estropeo, y
si… no vaya a ser que…?» Ni hablar, hasta que no encuentre el manual, ni
tocarla, pero bonita bonita es… bueno, nunca vi cosa igual, pero nunca.

























Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.2