Una postal, un destino desconocido, un cartero
Hoy tenemos una historia que contarte
![[Img #5103]](upload/img/periodico/img_5103.jpg)
Hoy a nuestros lectores, les regalamos una historia que
merece la pena ser compartida, porque en este mundo en el que vivimos, los
pequeños detalles nos muestran la calidad de las personas que nos rodean.
Francesca Llobell Durá, vecina de nuestro municipio, recibió
una postal, y eso no tendría nada de extraño, porque a diario los carteros
reparten miles de cartas, postales, paquetes etc…pero en esta ocasión, sí que
existe algo especial en este reparto. ¿Por qué se preguntará el lector?
La respuesta está en que la persona que escribió esta postal
desde los Estados Unidos, desconocía la dirección de Francisca, y con tan solo
unos pequeños detalles explicados en la misma postal, el cartero tuvo a bien,
añadir la dirección de su puño y letra, para que esta pequeña tarjeta, llegara
a su destinatario.
Como bien dice Francisca: "Recibir estás cosas produce un
alto efecto de alegría, recuerdos y ganas extra de ver a quien remite. Produce
una llamada al acto, risas y gritos de euforia por teléfono y te recuerda que
hay amistades que se ríen de la distancia porque mente y sentimientos siguen
conectados. Mi dirección ha sido completada por el amable cartero."
Desde aquí nuestra felicitación al equipo de correos y en
especial a los carteros de toda la vida, por la labor tan encomiable que
realizan a diario, y que pasa desapercibida para muchos.
Y un agradecimiento a Francisca por dejarnos compartir
esta bonita historia de una postal, algo que está en desuso, y sin embargo nos
sigue alegrando el recibir una estas tarjetas, enviadas desde cualquier rincón
del mundo
![[Img #5103]](upload/img/periodico/img_5103.jpg)
Hoy a nuestros lectores, les regalamos una historia que merece la pena ser compartida, porque en este mundo en el que vivimos, los pequeños detalles nos muestran la calidad de las personas que nos rodean.
Francesca Llobell Durá, vecina de nuestro municipio, recibió una postal, y eso no tendría nada de extraño, porque a diario los carteros reparten miles de cartas, postales, paquetes etc…pero en esta ocasión, sí que existe algo especial en este reparto. ¿Por qué se preguntará el lector?
La respuesta está en que la persona que escribió esta postal desde los Estados Unidos, desconocía la dirección de Francisca, y con tan solo unos pequeños detalles explicados en la misma postal, el cartero tuvo a bien, añadir la dirección de su puño y letra, para que esta pequeña tarjeta, llegara a su destinatario.
Como bien dice Francisca: "Recibir estás cosas produce un
alto efecto de alegría, recuerdos y ganas extra de ver a quien remite. Produce
una llamada al acto, risas y gritos de euforia por teléfono y te recuerda que
hay amistades que se ríen de la distancia porque mente y sentimientos siguen
conectados. Mi dirección ha sido completada por el amable cartero."
Desde aquí nuestra felicitación al equipo de correos y en especial a los carteros de toda la vida, por la labor tan encomiable que realizan a diario, y que pasa desapercibida para muchos.
Y un agradecimiento a Francisca por dejarnos compartir esta bonita historia de una postal, algo que está en desuso, y sin embargo nos sigue alegrando el recibir una estas tarjetas, enviadas desde cualquier rincón del mundo























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