Primeras vivencias de la joven estudiante María Zaragoza Chiarri en Japón
En el marco del Programa de Intercambio Juvenil de Rotary y auspiciado por el Rotary Club de Benissa-Teulada, la joven María Zaragoza Chiarri viajó a Japón a comienzos de agosto. Pasará el año académico en ese país asistiendo a clases y conviviendo con varias familias japonesas.
En la primera carta que María ha escrito contando sus vivencias en los primeros dos meses, cuenta que el tiempo se le ha pasado rapidísimo y que ha estado unos días en un campamento de verano con los demás estudiantes de intercambio procedentes de Brasil, Estados Unidos, Suecia, Eslovaquia, Francia, Turquía, Tailandia, México y Alemania. Además de aprender japonés de forma intensiva, escribe María que “entre los estudiantes hablamos inglés y creo que al final de año habré mejorado mucho.”
La joven pone de manifiesto que su familia de acogida es muy atenta con ella y que se siente muy bien. Observa que “aquí es todo muy diferente a España, y cambia mucho todo en un año de intercambio” para concluir diciendo que cree que “todos vamos a volver como una persona nueva, independiente, y con una forma mejor de ver el mundo y pensar”.
Los miembros del Rotary Club Benissa-Teulada se sienten muy orgullosos de que jóvenes como María, a través del Programa de Intercambio Juvenil de Rotary, se conviertan en embajadores y embajadoras de buena voluntad contribuyendo al acercamiento entre la gente de todo el mundo y que tengan la oportunidad de hacer buenas amistades que, según María, “seguro que serán para siempre”.
En la primera carta que María ha escrito contando sus vivencias en los primeros dos meses, cuenta que el tiempo se le ha pasado rapidísimo y que ha estado unos días en un campamento de verano con los demás estudiantes de intercambio procedentes de Brasil, Estados Unidos, Suecia, Eslovaquia, Francia, Turquía, Tailandia, México y Alemania. Además de aprender japonés de forma intensiva, escribe María que “entre los estudiantes hablamos inglés y creo que al final de año habré mejorado mucho.”
La joven pone de manifiesto que su familia de acogida es muy atenta con ella y que se siente muy bien. Observa que “aquí es todo muy diferente a España, y cambia mucho todo en un año de intercambio” para concluir diciendo que cree que “todos vamos a volver como una persona nueva, independiente, y con una forma mejor de ver el mundo y pensar”.
Los miembros del Rotary Club Benissa-Teulada se sienten muy orgullosos de que jóvenes como María, a través del Programa de Intercambio Juvenil de Rotary, se conviertan en embajadores y embajadoras de buena voluntad contribuyendo al acercamiento entre la gente de todo el mundo y que tengan la oportunidad de hacer buenas amistades que, según María, “seguro que serán para siempre”.
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